martes, 7 de diciembre de 2010

Una opinión. ¿Hay más?

El artículo de GEICAM que comentábamos "ayer" demuestra beneficio en supervivencia libre de enfermedad. Apunta pero no da estadísticamente en el beneficio en supervivencia global. No se acompaña de editorial y el comentario breve del resumen sí es todo un editorial: "As compared with the standard regimen, the combination of docetaxel, doxorubicin, and cyclophosphamide reduced the risk of recurrence of node-negative early-stage breast cancer, but it offered no survival advantage and was associated with significantly higher rates of toxicity"

Estamos hablando de un subgrupo de pacientes que tiene una supervivencia a cinco años del 93,5% y puede que este tratamiento, ya estandar en grupos peores, la suba a 95,2%. Está claro que mejorar lo bueno siempre es más dificil. Carmelo, ya jubilado, decía que no usaba antraciclinas en cáncer de mama. En adyuvancia ganar ese plus que daba la antraciclina le parecía que era a costa de mucha toxicidad y en paliativa, le parecía que quitaba calidad de vida. Así que funcionaba con el CMF clásico (el oral, sí). Era su opinión. Hoy en día, todo el mundo las usa sin dudar en adyuvancia.

Mi opinión ahora es que añadir taxano a la adyuvancia añade otro poquito, coherentemente, a todos los subgrupos, aunque siempre sea más dificil mejorar lo bueno, insisto. ¿Hay en la sala alguna opinión más autorizada?

1 comentario:

BULBUL dijo...

En una enfermedad en la que el procentaje de recaídas es tan bajo, es imposible obtener resultados "espectaculares". Pero esa reducción del riesgo de recaída supone, en números absolutos, muchas mujeres que no mueren por cáncer de mama. El seguimiento es demasiado corto para poder detectar aun diferencias en supervivencia global, y más en una enfermedad como el cáncer de mama, en la que las recaídas pueden diferirse mucho en el tiempo.
A día de hoy, es cierto, tratamos a muchas pacientes sabiendo que buena parte de ellas no recaerían aunque no se les administrase la quimioterapia. El problema radica en que no hay manera de saber quiénes son las que más se benefician de esta quimioterapia adyuvante, y por lo tanto nos vemos "obligados" a tratarlas a casi todas.
Por lo tanto, considero que se trata de un avance importante, que nos demuestra que poco a poco, tal vez algún día consigamos que, diagnosticadas en una fase precoz, ninguna de nuestras pacientes recaiga. Es una utopía, lo sé, pero si no investigamos está claro que nunca lo conseguiremos.