martes, 8 de junio de 2010

Querida Ana



Te iba a contestar en los comentarios, pero creo que tú y el tema bien merecéis una entrada completa. Si me lo permites, nos trataremos de tú, me parece más cercano:

Por partes: En primer lugar, y aunque simpatizo con Bulbul y comparto opiniones fundadas en hechos, no sé si me considera su amigo. Pero puedo adivinar que no te ha censurado ningún comentario. Lo único que pasa es que está en el congreso americano, sin acceso fácil a Internet. De hecho, yo le envié mi comentario nada más leer el tuyo y tardó cuatro días en ponerlo.

En segundo lugar, la que tiene cáncer eres tú, y lo siento, y también siento que no consideres que los oncólogos jugamos en el mismo equipo que tú, y que seas tan "egoísta" de no considerar que también hemos tenido cáncer (con varios casos recientes en mi entorno más o menos próximo), y tendremos cáncer muchos otros (uno de cada 3 a 5 españoles, sobre todo si vivimos lo suficiente). Y te equivocas al echarnos en cara que no te hayamos dicho por qué te ha dado. Los médicos no estamos por encima de la vida y la muerte, nos limitamos a aceptar la mortalidad del ser humano, y luchar porque su paso y el nuestro por la vida sea luminoso, feliz y la inevitable salida, lo más tardía y digna posible.

En tercer lugar, Ana, yo no soy tu médico, pero seguro que alguien lo es, y para él, tú eres Ana, no un cáncer. Y te ofrecerá todo lo que esté en su mano, que hoy en día en nuestro país está en la mano de todos los profesionales del sector. Y como bien sabemos todos, hoy en día tenemos más preguntas y limitaciones sobre "el cáncer", que respuestas y curaciones sencillas. Entrecomillo la palabra "cáncer" porque la usamos para referirnos a los más de 200 tipos que hay, todos diferentes, pero todos con células mutadas, tan reales como los productos que puedes encontrar en los estantes de tu supermercado. Y esas células reales no se han mostrado hasta hoy sensibles a nada que uno piense, o visualice. Lo mismo que los productos de los estantes del supermercado no se inmutan porque yo piense en comprarlos. Sí te concedo que tu sistema inmunitario tiene algo que ver con el control del cáncer (desarrollamos más de 200 a lo largo de la vida, si vivimos lo suficiente ;-). Pero no se admite que la mente tenga ningún efecto práctico sobre ese control.

Insisto en los hechos reales. Se puede viajar a la luna, pero no se puede visitarla (con nuestro cuerpo mortal, quiero decir) solamente con pensar en ello.

Y llegamos a Hammer. No se puede admitir que se juegue con la esperanza de las personas vendiendo humo.  Donde no llega la humanidad aparecen los visionarios prometiendo y engañando. Vendiendo un pseudo-sistema que parece coherente. Con trucos como que "tú puedes", "él también pudo", "no nos dejan", "son como Hitler", "¿que daño les hace que nos quiten la esperanza?"

Termino: Nosotros no quitamos. Donde no hay, no hay. Y el resto es timo. Los conflictos internos, en el sentido real, psicológico, de la palabra los tiene que resolver cada uno, con los recursos que existen; la psicología es una ciencia útil. Pero eso no tiene nada que ver con el cáncer. Si unos iluminados, con teorías atractivas pero tan falsas como Harry Potter, venden (una vez más) la curación sencilla del cáncer, y mucha gente rica y lista se sigue (nos seguimos) muriendo, es un timo. Y los timos los persigue la ley. Porque los timos que se basan en la esperanza de la gente alimentan falsas esperanzas. Y hacen mucho daño.

No te equivoques, Ana, todos luchamos por una vida digna y todos estamos condenados. Lo triste es que un falsario nos intente convencer de que nuestro supermercado no es tal, es una bucólica y preciosa playa de Hawaii, mientras nosotros empujamos un carrito con las ruedas desajustadas y nos preguntamos en qué estante estará escondida el azúcar.

No estoy seguro de mi medicina, tengo miedo a muchas cosas, me sé el nombre de pila y a veces el apodo de los 17 pacientes que tengo ingresados hoy en mi planta, que, por cierto, cambian cada cinco coma treintaysiete días, no se me ocurre nada más que ofrecerte mi ayuda en lo que puedas necesitarme.

A la espera de tus noticias, recibe un cordial saludo

Ramón  

PD: Lo de la ley y el orden social lo comentaba por intuición. Veo que hay más, y me alegro por mis pacientes.

2 comentarios:

Ana dijo...

Lo primero, agradecer que tomes tu tiempo tan preciado, en contestarme.
Gracias.
Lo segundo, pedir perdón a Bulbul, por si en algo he podido ofenderlo.
Sigo pensando que me tranquiliza mucho más saber que pede que en mi mente esté mi curación, de hecho a día de hoy, no dudo en que me voy a curar.
No he querído decir que la medicina no sea buena, lo que quiero decir es que está tan super especializada, que a un oftalmólogo, no le pidas otra cosa que no sea de ojos...
Con lo que se pierde la mirada holística del paciente, se pierde la humanidad, quien la pierda, por supuesto, eso como en cualquier trabajo que uno desempeñe.
Me he sentido como un número más de una estadística, que no deja de ser eso, pero yo no soy un número y entiendo que no se me pueda decir lo que no hay, pero si me dices que me quedan muy pocos meses por estar en un estadio 4, te aseguro que eso es lo que me va a quedar, pero cuando voy a un médico, con su especialidad realizada, pero que lleva desde los 9 años (por su familia) metído en la medicina holística y que quiso estudiar la occidental, para así poder contrastar, es un médico que me dá confianza y que en ningún momento me ha condenado, todo lo contrario, ha hecho que entre en un estado de conocimiento propio, he descubierto que es lo que me ha llevado a una bajada del sistema inmunológico, he descubierto el conflicto interior que me tenía segregando adrenalina continuamente y dañando todos mis tejidos, he conseguido resolverlo y a día de hoy, justamente hoy me han dado resultados del pet-tac y han desaparecido las metástasis y el tumor primario.
Desde que conocí a este médico se me quitaron todos los miedos y temores y me dá mucha rabia de que la gente no conozca esta opción, porque simplemente los "médicos" no creen en ella, y es lógico...
Un saludo
No se lo que pasará mañana, pero hoy estoy

Susana dijo...

Enhorabuena, Ana, yo te creo ya que he vivido una experiencia parecida.